miércoles, febrero 03, 2010

Mañana llega la mudanza

Llega mi súper comedor, mis libros favoritos, mis libros para enseñar español, mis diccionarios, mis libros de francés, de inglés de chino, llegan mis abrigos de otoño, de invierno, mis vestidos de primavera, llega una tetera azul maravillosa y mi juego de té chino y mis lápices y la vajilla azul, llegan dos cobijas de lana y cuadernos y chucherías, me pregunto dónde meteré tanta cosa, dónde la ropa, pues en los próximos meses no creo que me quede nada de eso, dónde voy a meter los libros si mi estudio es doble estudio, y mis libros aumentan sin misericordia, habrá que organizarse bien y mientras organizo, sin cargar nada claro, voy retomando mi vida literaria en la Ciudad de México y laboral en la bella Tlaxcala.


Antes de comenzar con las invitaciones quisiera comentarles que los días que he estado en Tlaxcala la política está en su mera efervescencia, reuniones por acá, desayunos, comidas, renuncias multitudinarias a las presidencias municipales para las diputaciones o de plano para la gubernatura del estado y en las dependencias también, bueno digamos que hasta Maquiavelo se quedó chirris, es de plano una vergüenza, el poder por el poder. A que mis coterráneos hay que de vez en cuando voltear a ver al pueblo.

Y hablando del pueblo, no sólo los políticos andan en la luna, los poetas nos vamos directo a ella y nos ponemos a leer en el metro, plazas, bares o cafés y pues como ese es mi oficio están más que invitados a escucharme el 18 de febrero a las siete de tarde en la Colonia Santa María la Rivera :

No hay comentarios.: