jueves, marzo 22, 2007

Agua caliente

He descubierto el placer del esa caliente, al principio, me causaba extrañeza esa manera de beber de los chinos, agua, simple y caliente a todas horas, a veces on té pero siempre agua caliente en primavera o en invierno, con 30 grados a la sombra o bajo cero, agua caliente deslizándose por los labios, llegando lenta y placenteramente por todo tu cuerpo, he descubierto ese placer y hoy que se quemó mi olla para el agua, he sufrido de agua caliente, con la misma nostalgia que produce la ruptura, es la tercera vez que me quedo dormida y el agua se me quema y las ollas se me queman, les salen hoyos abajo por donde se puede ver pasar el tiempo y de inmediato comienzan a oxidarse, imagino que se debe a la nata de sales o de cal que les sale en cada hervida, mientras tanto los invito, un vaso de agua caliente es un placer en los labios.

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