23 de noviembre de 2020

 Vecinos y maldad en pandemia

Durante la pandemia me encerré a lodo y agua. Nadie me hacía salir, muchas veces tuve qe decir un no rotundo a fiestas particulares de amigos y conocidos, un no rotundo a fiestas infantiles. Tuve insomnio algunas veces y otras aproveché para terminar una tesis y escribir en estos días de octubre una novela.

    No todos reaccionamos igual, la maldad se desató en las calles, en este caso ví como algunos vecinos se organizaro para levantar una barda en un terreno ajeno, en la madrugada de un viernes, pues antes ya habían intentado construir ahi, también un pedazo de barda y una juez de paz les suspendió la obra. La pandemia generó que las personas no pensaran y que estos vecinos azuzados por la tremenda delincuencia que se desató y quien sabe que ideas y asesorados por quién, emprendieron la azaña que descubrí  gracias a mi insomnio en el mes de noviembre de 2020. 

    Tomé fotos desde mi casa, lo denuncié en redes y luego lo bajé, pues me dieron terror esas personas de mente desquiciada, que hace maldades en pandemia y a la luz de la noche y en bola para que nadie sea responsable. Malditos los de la idea.