sábado, septiembre 30, 2006
Prosas antropófagas de Mainor González Calvo
Prosas antropófagas de Mainor González Calvo
Isolda Dosamantes
Escritor costarricense nacido en la década de los setentas, melómano por naturaleza, de carácter amable, entregado a las letras primero como estudiante y actualmente como catedrático, buen bebedor de cerveza y guaro, fue miembro alguna vez del Taller Francisco Zúñiga en San José y buen cliente de la cantina El Morazán, amigo entrañable que me ha mantenido al tanto de sus publicaciones, su primer libro Calvarios y catarsis data de 1997, unos meses antes de que lo conociera en un encuentro de poetas en San José, recuerdo que era un libro en que la sencillez salía a la vista, en el que uno se mezclaba con su ya desde entonces voz poética, actualmente radica en Guanacaste donde es profesor de la Universidad de Costa Rica, eso espero, debería más bien decir que a principios de este año radicaba ahí y que desde allá me envió su libro Prosas antropófagas, a la ciudad de Mao, Xiangtan. He de confesar, que el día que me llegó el libro era primero de enero, fue mi navidad y mis reyes magos, así como me llegó me sumergí en el libro, lo disfruté por su ironía y la dureza de sus poemas hacían buen juego con la desesperanza que me provocó ese invierno, con la soledad misma. Supe entonces que era un libro que debía reseñar, de releer con otra mirada no tan cercana al dolor.
El título del libro define a su contenido, pareciera que Mainor decidió realizar una especie de estudio antropológico de las obsesiones humanas, la alquimia, el que escribe, la mujer, lo cotidiano, nos habla de la existencia del hombre en este siglo, de su desesperación. Prosas antropófagas es un libro irreverente, que apuesta una forma y una voz, un posición ante el mundo, una preocupación del mundo, González Calvo hurga a través de sus prosas poéticas en los resquicios del abismo, el abismo de la mirada, de las uñas, hurga en el vació del hombre que ha olvidado su humanidad. Un libro con fuerza en las ideas, a veces la prosas parecieran pequeños ensayos a la manera de Julio Torri, sin embargo Mainor no es tan concentrado como Torri, Mainor trabaja con las emociones y el ritmo, la mayoría de sus poemas son acumulativos, siempre hay algo más, una frase que avanza hasta el fina, un juego con las palabras para provocar eso, eso que logra, una especie de abismo en el lector, un querer ir por un guaro a la cantina, una incertidumbre. A continuación pongo dos poemas del libro, como una invitación a su lectura, si bien irreverente y provocadora también fascinante mente estremecedora.
Jaguares y máscaras
Sus ojos atraviesan la noche
andar lento, agazapado, meditabundo,
pasos del hombre hacia el encuentro
donde la fuerza es una garra, mirada felina que despierta.
Corazón de montaña,
de magia que vaga entre los hombres.
Corazón de jade silencioso,
cazador del viento
donde danza el espíritu.
Ven hacia mi garra de noche
seré sacerdotisa de tus labios
y saciaré tu sed de sangre con mis muslos.
ven nahual de la noche con tus ojos felinos
a mirarme desnuda entre tu piel.
Fauces, garras, un ambiente se respira en Pekin, andan los felinos de México en el corazón de China, una máscara olmeca-chicalanca, un jaguar del cerro colorado, otro olmeca, pectorales mayas, garras y piel son parte de la exposición de México "El jaguar prehispánico. Huellas de lo divino" en el increible y moderno Museo de la Capital. Fui con mis estudiantes, Edgardo Bermejo, como buen historiador y contador de historias, los tenía fascinados.
Espacio
En el espacio, se cae la red, una multitud de mails desesperados invaden mi correo: auxilio, ayuda, socorro, el caos, me digo. Mis obsesivos compañeros del diplomado estaban desesperados. Estuve en trenes de ida y vuelta. Despierto, han pasado tres días, trece cuartillas de foro y yo, ¡jua! en las nubes. Lo peor, estoy fuera de la vieja discusión sobre diversidad del mundo hispanohablante. Me interesa. Me abruman. Entonces salgo en busca de viento.
miércoles, septiembre 27, 2006
La mamá de Meimei y los profesores de Beiwai
Foto: de izquierda a derecha, profesor jubiladao, Dong Yangzhen ,traductor del Quijote, Sheng Li, experta en la enseñanza de la traducción simultánea, Eraclio Zepeda y Elva Macías, el profesor Liu gran conocedor de los problemas socioeconómicos y políticos del mundo hispano, y la vicedecana, Chu Lei. Todos son o han sido profesores de Beiwai, mi primera universidad china. SIDC
Por la mañana del domingo, me tocó hacer cajas de libros y de ropa, ropa de invierno que no tardará en llegar, será seguramente después de la noche de la luna y de la fiesta nacional, empezaran los vientos a calar y uno a ponerse paulatinamente los suéteres, luego las chamarras, mallas y sombreros. Fueron tres cajas de libros, pesadas pesadísimas casi cien kilos y otras tres maletas, creo que soy como un ratón que todo lo acumula. La mamá de Meimei me decía cosas en chino, me desesperaba no entender, estaba a punto de ponerme de malas cuando nos fuimos a comer, y quien se va aponer de malas ante la maravillosa comida picante de Hunan, carne de puerco con rajitas, pescaditos rebosados y con sabor picante, sopa de hongos, pollo con chile rojo, calabaza en salsa agridulce, una especie de lechuga frita, una serpiente de agua y para la mexicana… ¡agua de maíz!
Después de comer vino el martirio, casi dos horas para lograr que las cosas se fueran en el mismo tren que yo, y eso que, Buda es grande, los papás de Meimei, me ayudaron a cargar y al embalaje. Luego la despedida, Meimei se iba a Xiiangtan, y su mamá y una amiga de su mamá me acompañaron al tren, hasta mi cama dura, y estuvieron allí un rato hasta pocos minutos antes de partir mi tren hacia Beijing. En Beijijng, después de, ahora si de dieciséis horas, la desesperación de ir por mis cajas y cargarlas, o ver quien las cargaba y cuanto me iban a cobrar y todo eso hasta la casa, no me salió tan caro, aunque si fue un trámite burocrático que me costó como cinco horas. Al fin llegué a mi departamento, aventé las cajas, y me di un baño, quería ir a yoga pero no pude, a nadar pero no lo hice, lo que sí hice es reabrir el libro de Mainor González Calvo, le debo una reseña desde hace como un año, y es que lo leí en Xiangtan y me metió aún más en el mundo oscuro de las preguntas de los abismos.
Estaba en esas de revisar mi mail cuando recibí la invitación de Edgardo a escuchar una charla de un viejo maestro mexicano que daba clases de español pero en 1963, antes de la Revolución Cultural y en plena época de Mao, pensé en ir o no ir, por eso de los prejuicios y las historias de dolor en el pueblo, que no se olvidan, pero decidí ir y valió la pena, ya había escuchado su fama de gran conversador y lo és. Elva Macias, su esposa y poeta mexicana, leyo algunos poemas que se basaban en su experiencia en China, en sus percepciones de 19 años en oriente, Eraclio Zepeda, dio una charla sensacional, su ex colega el profesor Dong Yangzheng, estaba feliz, bueno él siempre tiene un humor increíble, era un anecdotario andante, los callejones, los mercados, la ciudad amurallada, la primera nevada, Sheng Li también estaba contenta, ella había sido alumna de estos mexicanos que son parte del antecedente del hispanismo en China, con la variante mexicana y el profesor Liu, el Gordo Liu, como le dicen estaba encantado con al plática. Luego Beiwai nos invitó a comer, Liu, como buen conocedor de la cocina china, recomendó los platos, todo un experto, la gente comió placidamente, no enumeraré el menú porque era demasiado variado, baste decir que estuvo delicioso.
Me encantó conocer a Eraclio en estas tierras, a la mirada dulce de su esposa, he de decir que ya los conocía, a ella en Oaxaca en un encuentro de los poetas del mundo latino y a él en la ciudad de México, también en un encuentro de éste tipo, curiosamente a los dos me los presentó marco Antonio Campos, a quien hace mucho que no veo pero que quiero muchísimo.
Foto 1: de izquierda a derecha: amiga de la mamá de Meimei, la mamá de Meimei y yo, SIDC.
Foto 2: La comida de Hunan.
Changsha II
Cantar como si fuera rito, cantar para uno mismo para nadie, cantar con voz desafinada, cantar despacio, cantar de José Alfredo, cantar como se aúlla ante el dolor, cantar porque sí porque es domingo, cantar bajo la ducha, cantar en el silencio, cantar como la ópera, como Benítez, cantar en al albur, en el desierto, cantar para ti mismo, en Karaoke.
Y sí, me llevaron de Karaoke, a cantar en chino y en inglés, a cantar en español a no sé quién, lo interesante es que es un edificio completo de diversiones, primer piso, recepción como de hotel y un bar con música de disco, segundo piso maquinitas, juegos de maquinitas, bebidas y botanas, tercer piso Karaokes pequeños de dos a cinco gentes, barra libre de tés, aguas y comida, el cuarto piso Karaokes más grandes, de veinte o más personas. Estuve a punto de aburrirme, pero estaba feliz con mis amigas.
Changsha I
Llegué a Changsha con mis regalos de Chiautempan, bufandas, cobertores de lana, gorras y chanclitas, la mamá de Pilar -Meimei desde ahora- amable, sonriente como siempre, me di un baño , baño confortable, baño feliz, luego un banquete de mariscos con sus padres, camarones, pescado al picante, verduras, almejas, sopa de almejas, mejillones, y hasta carne, arroz imprecindible, fuimos a l café, llegó Ángela sonrisas, fuimos por un té de la belleza, sabía amargo, amargo que te cala la boca, es el té que tomaba mi abuela pa´ la bilis, no sé como se llama, no recuerdo, eso y unos postres deliciosos, de leche de papaya, de frijoles Estas pequeñas me han hecho probar hasta culebras!
Foto 1: leche con huevos tipo flan, leche con huevos papaya y pétálos de loto, leche con huevo y con frijoles, té amargo. SIDC.
Foto 2: Angela sonrisa, la de cabello largo, Meimei mi amiga.
Espera
La noche se colgaba de nosotros, salimos a las nueve cincuenta de la noche, unos con bancos para el viaje, otros con bolsas llenas de fritangas, otros con sopas instantáneas, con fruta, con sus ansias. El vagón era bullicio, olor a tabaco, a sudor del día. Una mujer comenzo sus gritos, una vendedora, daba un discurso, discurso de Mao, figuras de Mao de la buena suerte, figuras con signos chinos, gallos con mao, serpientes, conejos, estatuas doradas, placas doradas, colguijos de Mao. El carrito de las fritangas y los refrescos, el de las frutas, las dos de la mañana y el cansancio, una parada, otra, movimiento, unos bajan del tren y otros suben, estiro las piernas, una chica de un banco agarra asiento, sonreímos, 12 paradas, duermo. han pasdo 18 horas y todos están cansados, todos los que seguimos en el tren desde Beijing, han cambiado los rostros, son fastido o frescos que acaban de subir, hace frío. 21 horas y la espalda es un aguijón que me calcina, 25 paradas y llego a mi destino. Una mano ágil me saluda, es Pilar la de la tierra de Mao, es Pilar con sus cabellos punk, es mi amiga Changshanera.
Trenes de ida
Real de 14 con parada en Lijiang
A los viajeros de trenes
Los trenes son la nostalgia, el recuerdo,
la noche llena de voces y suspiros,
el colgarse las estrellas a los hombros
el pasar un valle y un desierto
las mujeres con canastas,
la torta, el taco,
son la sierra tarahumara
el cielo desierto de los pueblos
es el guajolote bajo los pies de la abuela
los trenes son nostalgia,
es el sumidero hacía Chihuahua,
el arrozal hacia Yunnan
es el recuerdo, los olores,
el murmullo del alba y los paisajes.
El viernes 22 de septiembre compre mi boleto para Changsha, tuve suerte pues es raro encontrar un boleto el mismo día de tu partida, en general siempre se acaban antes y no puedes comprarlos sino con tres días de anticipación, la gente se mueve mucho en China, prepare una maleta minúscula pues iba por mis cosas, libros, ropa de invierno y otras minucias que uno guarda, el tren salía a las seis así que salí de mi casa con dos horas de anticipación, tomé un taxi, mi chino changshanhua se hizo evidente, el taxista me veía con cara de no te entiendo, tuve que sacar mi boleto para que supiera a dónde iba, l había trafico, tomó una ruta desconocida, el camino se me hacía largo, largo, avanzaba el reloj y nada que llegábamos, al fin vi que nos acercábamos y las manecillas decían que eran las cuatro y media, sin problema me dije, pero no, los autos parecían ir más despacio, llegué a un extremo de la puerta de la estación al cuarto para las seis, corrí por las escaleras, no me detuve, seguí hasta adentro corre que corre, subí unas escaleras, me perdí, regresé baje a la sala de espera, el reloj decía que eran cinco para las seis, atravesé la sala y llegue a la puerta de trenes cuando faltaban cuatro minutos para las cinco, no me dejaron pasar, una china discutía lo mismo, otro que llegó corriendo y los polizontes no os dejaron, me dejó el tren. Me dejó el tren y había gastado más de setecientos pesos en el boleto, boleto de lujo, cama blanda, camarote de dos literas, boleto caro, con televisión y películas, hasta en inglés, con pantuflas gratis, con baño limpio, me dejó el tren. No, no lo podía creer, me había dejado, la china me dijo que intentaría irse el mismo día, que cambiaría el boleto, el guardia me dijo que era lo mejor, lo pensé, tarde en pensarlo y cuando me di cuenta la china no estaba, pregunte, a señas me dijeron dónde y cual ventanilla era para esos casos, la fila era enorme, como de cincuenta, la persona de adelante era nuevamente la china que gritaba a la puerta del tren. Sonreímos, me dijo que tomaría un tren esa misma noche, un tren de tercera, que paradas, me dijo 17 horas, dije que sí me arreglo mi boleto, de pronto me llamaron, un fotógrafo mexicano estaba en la estación iba con su novia nueva, novia extranjera, iban felices a pasar un fin de semana en un lago, yo desesperada, ahora tendría que esperar a las 9:50 para subir al tren, esperé fumando un rato en la calle, otro rato sentada por ahí, otro aburrida, a las 9 me dirigí a la sala de espera, por aquello y la mala pata me volvía a dejar, estaba llena, la puerta se abrió a las 9:20, sabía que no tenía lugar, me agandallé, me senté al final de un vagón con tal certeza de que nadie dudó que era mi lugar, el boletero pasó 15 horas después y el viaje duró 22. Me dejó el tren y sin embargo llegué a Chansha por mis cosas y el cansancio se me quitó cuando vi a mi amiga, a mi querda Pilar, que me esperaba con gran alegría.
Fotos: SIDC
lunes, septiembre 25, 2006
Homenaje a Delia Mc Donald Woolery
A Delia Mc Donald Woolery, porque como diría José Francisco Conde Ortega "los amigos son la familia que uno escoge", cuando un amigo es feliz, uno lo es por doble partida.
Voy llegando del sur donde el viento corre despacio, del sur lleno de arrozales desfilando en la tarde, voy llegando de entre el crepúsculo y el tren con su rumiar constante, voy llegando con ciento veinte kilos de libros, llego con la sonrisa del viaje, de la comida picante, del abrazo del viento; en el camino vi un anciano leyendo, una mujer vestida de tristeza, un niño con su almohada, en el camino jugaban a las cartas, fumaban y dormían, un hombre con cuerpo de nostalgia arreglaba maletas, vengo llegando y encuentro en mi correo una estatua, una estatua de viento con viento en la memoria, es el abrazo del pueblo a la voz del canto del poeta, de la poeta que va de barrio en barrio con su barro, con su tinta en el alma de tintero con su punta de calle San José, voy llegando del sur y pienso en otro sur, el sur de Puerto Negro, del arroz pinto, de las casas color mamey, de los guaros y cantinas azabache, voy de mi mente al sur de la Negra y viajo en su abrazo hasta llegar ahí donde nació su sonrisa, esa tarde de premio y de canciones.
Isolda Dosamantes después de 20 horas de viaje de Changsha a Beijing, 26 de septiembre de 2006.
Fotos: Delia Mc Donald Woolery, Costa Rica.
viernes, septiembre 22, 2006
Hay unos ojos
Hay una voz que no escucho de hace tiempo, unos ojos que reflejaban mi mirada, un olor que penetraba por mis poros, hay una voz y unos ojos y una piel que deseo entre mis sueños, que veo entre las sombras que cada tarde me acompañan.Viene de lejos de allá, de la tierra donde nacen los ocotes, de allá donde las carpas son parte del paisaje, de allá donde las noches se llenan de estrellas.Sos ojos son luciérnagas que encienden a los míos, ascuas que deambulan por mis senos, serpientes que me abrazan a lo lejos, hay una voz, una piel, unos ojos que me hacen saltar, retroceder, caminar entre las aguas de la tarde.
Foto:fragmeto editado GP
jueves, septiembre 21, 2006
¿Soy de marte?
Hola ¿de verdad piensan que soy una marciana por vivir en China? Creo que algo de locura si que la hay. El otró día me preguntó eso un profesor: Isolda te es muy difícil entender a los chinos? a lo que yo dije: bueno, a veces, por ejemplo no entiendo que en una fotocopiadora, si le pides a alguien, que no sabe, una reducción, en lugar de decirte no lo sé hacer, por aquello de "no perder la cara" o quedar en ridículo te contesta: no eso no hay, eso no se hace aquí y punto, entiendo la idea de perder la cara, pero no logro asimilarlo del todo. El profesor chino se ríe y me dice ¿Entonces usted piensa que somos de Marte?... Huy para estás alturas ya me estaba exasperando, me había criticado andar de huaraches (enseñando los pies), había dicho que España estaba muy bien con Franco, que los mexicanos siempre perdemos nuestro tiempo, sin embargo, seguimos platicando un rato de las diferencias culturales, me salvó la camapana para dar mis clases. Un poco agobiada, por aquello de ser marciana llegue a casa y me encuentro con la llamada de una amiga de estos lugares, estaba llorando, apenas y podía a hablar y es que le pasó una de esas marcianadas que sólo pueden suceder por estos lares, andaba ella muy feliz en su bicicleta, todo había ido bien en el día, su novio -occidental por supuestos- la acompañaba, y de pronto, como salido de la nada le cae un escupitajo en la cara, el cabello y parte de la blusa, sin saberse toda embadurnada se detiene y le dice a su acompañante, ¡párate que ahora si voy a descuartizar a alguien! Y claro, no, para saber de donde vino, pues es práctica común, si de un puente o de un camión, de otra bicicleta, con esa impotencia mi amiga tuvo que quitarse la blusa limpiarse con ella y llegar a su casa como toda una zorra con su brasier de bolitas, con nauseas, con coraje, sintiendo la urgencia de un baño y la impotencia.; recordé entonces mi drama cuando me pasó algo parecido en los zapatos, la noche de ayer en la alberca, cuando un chino comenzó con sus enormes ruidos para lanzar un, si un gargajo fuera, mis pequeñas naúseas y desesperación, mis gans de decirle, hey no seas cochino, entre estas memorias cotidianas decidí que entre chinos soy un poco marciana y bastante exótica. Si no entiendo eso de andar escupiendo a ton ni son, de los ruidos con la boca...aunque me enteré que un amigo chino está elaborando un manual de buenos modales, para eso de las olimpiadas. Y que conste que ésto último no es broma, pues será difundio por internet y toda la cosa. A respecto hoy me enteré que mis estudiantes tienen una clase de civismo internacional, eso me gustó, deberíamos tenerla en México: si vamos a Turquía no pedríamos carne de puerco, en España nos pasaríamos en paro, en China haciéndo ruido con la boca pues es una manera de decir que nos gusta la comida, en la India eruptando que es la manera de agradecer...es decir, entendríamos un poco más del otro que como pueden ver, nos hace falta.
martes, septiembre 19, 2006
Hace dos noches
Hace dos noches, después de haber dado dos vueltas a la alberca, de hacer mis tarabajos del diplomado, de ir por las compras cotidianas, llegué a mi casa agotada, pensé que era hora de dormir y descansar, de soñar, pero no pude, en la cama comencé a dar vueltas, me picaba el cuerpo y decidí darme una ducha, por aquello de que quizá el cloro de la alberca no se hubiera esfumado con la sauna y el regaderazo, nada. Mi cabeza daba vueltas en torno al novio, no novio. Era como un darse cuenta de las noches que agobian al cuerpo, de las que te hacen imaginar sus besos en otros labios, de las que la impotencia del "está lejos" te orilla al llanto. Entonces un buen apapacho puede ser un chocolate, una llamada telefónica, un grito, lo probé todo, hasta me aventé un programa de ópera china, para quién no conozca la ópera china, eh de decir que, a pesar de sus hermosos vestidos y movimientos, la voz es demasiado aguda para nuestros oídos, demasiado molesto el no entender nada, pues ni así con todo el ruido pude deshacirme de esa sensación, más que el sentirse sola, porque he de decir que estoy contenta, que tengo amigos, que me voy de fiesta, que me siento muy a gusto, es algo de nostagia aguda posterior, no tengo manera de nombrarlo, es el querer que el otro esté contigo en el punto exacto donde te encuentras, estás bien y quieres copartirlo es una nostalgia de lo que como diría Sabina, de lo que nunca jamás sucedió pero en presente, para el futuro aún faltan unos segundos, que se pasan miestras escribo estas líneas. Intente dormir y no pude, intente llamar y no pude, intente cantar y no me sabía la letra de mis boleros existenciales, jua, así que de nueva cuenta encendí el televisor, era una historia de Ciudad Juaréz pero en China, una mujer descuartizada, unas orejas que dannzan con su tisteza como las que describe Carolín Forché en sus poemas ( http://poets.org/poet.php/prmPID/214 ), era un maniquí con y sin vida como los quecaptaba el lente de Nacho López, era un maniquí vestido con la ropa de la muerta, era un maniquí fotografiado por su asesino, fotocopiado y pegado por las calles, era una seire de la investigación del caso, caso en el que descubrieron al culpable, caso en que descubririeron la casa con olor a sangre, caso cerrado pero era un caso escalofriante, después de eso se esfumó la nostalgía y esntró por entre mi columna un escalofrío. Ya no dormí. La ciudad era gris.
Foto: La plaza más grande del mundo SIDC.
lunes, septiembre 18, 2006
Doctrina de Shu
Hoy tomé mi primera clase de Cultura China con el afamado profesor Dragón, fue bastante interesanate pues se habló del confucianismo, ya iré hilando sobre éste más adelante, sólo les mando una probadita de la Doctrina Shu, que habla de la tolerancia, de la reciprocidad y el altruísmo, en ella se marca la regla de oro de Confucio "No hagamos a otros lo que no queremos que nos hagan a nosotros".
Foto: Templo lamma. SIDC
domingo, septiembre 17, 2006
Conversaciones con Mainor
Los invito a leer un juego epistolar que nunca llegó a destino, por allá del 2002 una mujer desde la excárcel de mujeres de Santa Martha sueña con un poeta: Mainor y se imagina por las calles y los bares de Costa Rica bebiendo guaro con liga de limón: http://www.yoescribo.com/publica/comunidad/obra.aspx?cod=14566
Felicitaciones UNAM
Uno de mis grandes sueños, realizados ahora, fueron ser estudiante de la UNAM, en su momento cuando tenía 18 años y ansiaba entrar a la Facultad de Ciencias Políticas, a estudiar Ciencias de la Comunicación, que estaba de moda, al menos en mi cabeza, no se pudo, en casa fueron años de vacas flacas, de inventar negocios restaurantes, tacos al pastor, cafeterías, tiendas naturistas, fracaso uno tras otro cuando no se tiene el alma de comerciante, de hacer negocio y es que en mi familia, pues les ha dado por el estudio. Con el correr del tiempo egresé de la Universidad Autónoma de mi querido Tlaxcala (Nacho Trejo diría ya vas a empezar, después de Tlaxcala no hay nada...), la herencia de estudiar, de querer más me llevaron por diversos caminos tanto de la enseñanza como del aprendizaje y felizmente me hice puma, primero en el Cepe, dando clases de literatura a extranjeros y después en el Cepe como estudiante del DEFPELE, amabas experiencias universitarias dentro de nuestra Máxima Casa de Estudios me hacen enviar desde Beijing mi reconocimiento y aplauso a los cinco académicos de la UNAM que fueron reconocidos con el Premio Nacional de Ciencias y Artes 2006, entre ellos el rector de esta universidad, el Dr. Juan Ramón de la Fuente. Es por ello que incluyo, como homenaje a la UNAM el siguiente texto de José Ramón Enríquez:
Publicado en Reforma, Sección Cultura, el 15 de septiembre del 2006.
Pánico escénico
De Tavira, fiel a una voz
por José Ramón Enríquez
Cinco académicos de la Universidad Nacional Autónoma de México fueron distinguidos con el Premio Nacional de Ciencias y Artes 2006. Creo que estas designaciones significan un especial reconocimiento a la propia Universidad, sobre todo frente a quienes quisieran reducir la importancia de la educación oficial. Prueban sus óptimos resultados y la necesidad que el país tiene de respirar por los pulmones excepcionales que representan nuestra Máxima Casa de Estudios y todo el sistema de educación oficial en los Estados. El presupuesto que a fortalecerlos se destine (y que debe ser multiplicado por la próxima legislatura) redundará en beneficio del país.
En primer término ha sido distinguido el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente. Y vale la pena subrayar que, además de simbolizar a toda la institución, por sus propios méritos bien merece el Premio. Sé poco de ciencias pero algo sé de mí. y conozco, como lo indica el nombre de esta sección, el pánico. Tanto el delirio estético del dios Pan, como el infierno de las desestabilizaciones neurológicas. Por ello, las investigaciones del doctor De la Fuente sobre la paroxetina resultaron para mí fundamentales. También grandemente interesantes sus estudios sobre el alcoholismo desde la neurología.
Pero, sin duda, la designación que me ha tocado más de cerca ha sido la de Luis de Tavira. El ha sido mi compañero y mi maestro en los avatares del teatro, pero sobre todas las cosas ha sido mi hermano, y hoy, nuevamente, es un justo motivo de orgullo.
De Tavira llegó al teatro obediente a una voz. Y a esa voz ha sido fiel, en las buenas y en las malas, con apoyos o incomprensiones, con dolor y con júbilo. La fidelidad a la voz interna es su lección magistral más importante. No en balde sabe que “en realidad, somos pensados por aquello que pensamos”.
Es tres años más joven que yo pero su resonancia es veterotestamentaria. Y ahí quedan, para probarlo, esos 365 aforismos que conforman su libro El espectáculo invisible, publicado por El Milagro y CONACULTA en 1999. Le dio como subtítulo: “Paradojas sobre el arte de la actuación”.
Aunque haga referencia al libro axial de Denis Diderot, el concepto de paradoja en De Tavira va mucho más allá de la aparente oposición entre formalismo y vivencia. Si la orto-doxia es la “correcta” doctrina y la hetero-doxia es la “otra” doctrina, la para-doxia es el “más allá” de la doctrina. La imposibilidad, en el fondo, de que exista “una” doctrina. Es eso que habita en el espacio de lo inefable, o sea, de lo indecible. Ante cualquier imposición sistémica, De Tavira clamaría con San Juan de la Cruz: “Apártalos, amado, que voy de vuelo”.
Por ello mismo, en este libro que debería releerse año con año, afirma: “Habría que aventurarse sin miedo por linderos peligrosos que permitan transgredir las convenciones, entre el rigor austero y la asociación libre en que estalle con toda su violencia la presencia del presente y el presente de la presencia”.
Como un maestro zen, es peligroso cuando quiere repetírsele sin haber vivido la austeridad de su rigor ni el profundo amor al que apunta Loyola y que es epígrafe para el libro de De Tavira: “No el mucho saber harta y satisface el ánima, mas el sentir y gustar de las cosas internamente”. Amor y rigor, fidelidad a la voz que nos seduce.
Son éstas apenas breves notas de urgencia que deseo cerrar con un texto de De Tavira, publicado hace siete años, que vale dolorosamente para la actualidad nacional:
“… se advierte cómo se desempeñan los hombres en el guiñol embustero de la sociedad actual, adonde todos acuden convertidos en malos actores, a jugar con ardor sus roles asignados: jóvenes, hombres, viejos, hijos, padres, ciudadanos, sacerdotes, funcionarios, comerciantes todos, desfilando en el frenesí de un espectáculo atroz, sin ser capaces siquiera de mirarse unos a otros, pujando cada cual por imponer a los demás su propia comedia, confundidos en el caos de una verborragia desvergonzada e irresponsable, donde nadie puede ya creer a nadie, ni siquiera a sí mismo.”
Foto: Sueños de SIDC
En primer término ha sido distinguido el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente. Y vale la pena subrayar que, además de simbolizar a toda la institución, por sus propios méritos bien merece el Premio. Sé poco de ciencias pero algo sé de mí. y conozco, como lo indica el nombre de esta sección, el pánico. Tanto el delirio estético del dios Pan, como el infierno de las desestabilizaciones neurológicas. Por ello, las investigaciones del doctor De la Fuente sobre la paroxetina resultaron para mí fundamentales. También grandemente interesantes sus estudios sobre el alcoholismo desde la neurología.
Pero, sin duda, la designación que me ha tocado más de cerca ha sido la de Luis de Tavira. El ha sido mi compañero y mi maestro en los avatares del teatro, pero sobre todas las cosas ha sido mi hermano, y hoy, nuevamente, es un justo motivo de orgullo.
De Tavira llegó al teatro obediente a una voz. Y a esa voz ha sido fiel, en las buenas y en las malas, con apoyos o incomprensiones, con dolor y con júbilo. La fidelidad a la voz interna es su lección magistral más importante. No en balde sabe que “en realidad, somos pensados por aquello que pensamos”.
Es tres años más joven que yo pero su resonancia es veterotestamentaria. Y ahí quedan, para probarlo, esos 365 aforismos que conforman su libro El espectáculo invisible, publicado por El Milagro y CONACULTA en 1999. Le dio como subtítulo: “Paradojas sobre el arte de la actuación”.
Aunque haga referencia al libro axial de Denis Diderot, el concepto de paradoja en De Tavira va mucho más allá de la aparente oposición entre formalismo y vivencia. Si la orto-doxia es la “correcta” doctrina y la hetero-doxia es la “otra” doctrina, la para-doxia es el “más allá” de la doctrina. La imposibilidad, en el fondo, de que exista “una” doctrina. Es eso que habita en el espacio de lo inefable, o sea, de lo indecible. Ante cualquier imposición sistémica, De Tavira clamaría con San Juan de la Cruz: “Apártalos, amado, que voy de vuelo”.
Por ello mismo, en este libro que debería releerse año con año, afirma: “Habría que aventurarse sin miedo por linderos peligrosos que permitan transgredir las convenciones, entre el rigor austero y la asociación libre en que estalle con toda su violencia la presencia del presente y el presente de la presencia”.
Como un maestro zen, es peligroso cuando quiere repetírsele sin haber vivido la austeridad de su rigor ni el profundo amor al que apunta Loyola y que es epígrafe para el libro de De Tavira: “No el mucho saber harta y satisface el ánima, mas el sentir y gustar de las cosas internamente”. Amor y rigor, fidelidad a la voz que nos seduce.
Son éstas apenas breves notas de urgencia que deseo cerrar con un texto de De Tavira, publicado hace siete años, que vale dolorosamente para la actualidad nacional:
“… se advierte cómo se desempeñan los hombres en el guiñol embustero de la sociedad actual, adonde todos acuden convertidos en malos actores, a jugar con ardor sus roles asignados: jóvenes, hombres, viejos, hijos, padres, ciudadanos, sacerdotes, funcionarios, comerciantes todos, desfilando en el frenesí de un espectáculo atroz, sin ser capaces siquiera de mirarse unos a otros, pujando cada cual por imponer a los demás su propia comedia, confundidos en el caos de una verborragia desvergonzada e irresponsable, donde nadie puede ya creer a nadie, ni siquiera a sí mismo.”
Foto: Sueños de SIDC
jueves, septiembre 14, 2006
Mujer dormida
Soñé con él, me fundí en el abrazo de su mirada, de su aliento sabor a tierra. de su cabello. Estábamos en el campo, bajo un manzano mirando milpas, besándonos desnudos, estábamos sonriendo en nuestros cuerpos que eran viento.
Por la noche lo esperaba con esa ingenuidad emocionante que provocan los novios, me había pintado los labios, cambiado de ropa, de zapatos. Lo esperaba en el camino de ocotes de mi pueblo, lo esperaba en la punta del cerro y a lo lejos atisbé su paso alegre, llegó con una amiga, nos sentamos en unas cajas de Victoria, alguien me nombró como se llama a una extraña, salió en mi defensa, lo abracé, me esquivó y recordé el hueco, desperté sobresaltada, con un nudo en la garganta, desperté cuestionándome, soné con él y no me deja la tristeza.
Por la noche lo esperaba con esa ingenuidad emocionante que provocan los novios, me había pintado los labios, cambiado de ropa, de zapatos. Lo esperaba en el camino de ocotes de mi pueblo, lo esperaba en la punta del cerro y a lo lejos atisbé su paso alegre, llegó con una amiga, nos sentamos en unas cajas de Victoria, alguien me nombró como se llama a una extraña, salió en mi defensa, lo abracé, me esquivó y recordé el hueco, desperté sobresaltada, con un nudo en la garganta, desperté cuestionándome, soné con él y no me deja la tristeza.
Isolda Dosamantes, en la nostalgia nocturna
Ahora sí, el Templo Lama
Por el presente compañeros
Isolda Dosamantes
A Ignacio Trejo Fuentes, porque sí.
El Templo Lama es un lugar de retiro, un espacio diseñado para pensar, para respirar un poco de paz en medio de la gran urbe de Beijing, no es mala idea llevar un buen libro para sentarse a la sombra de un árbol a leer, aunque si te atraen los lugares llenos de misticismo, el aroma a incienso, purificará tu espíritu. Es importante comprar o llevar incienso para Buda, en cada templo deberás encender tres y harás tres reverencias con ellos, una por el templo, una por Buda y la tercera por todas las personas que van contigo, para las reverencias deberás unir las manos como cuando se reza en occidente al ángel de la guarda (aunque algunos han elevado sus rezos a algún arcángel, como Nacho Trejo Fuentes, el del Pachuca), después de colocar las manos en dicha posición se hará un movimiento circular partiendo del corazón y pasando por la mente tres veces pensando en nuestros rezos. Después de pasar la primera puerta donde están los vigilantes de Buda, que siempre tienen caras de malhumorados y son enormes pintados de colores brillantes, y hacer tus reverencias, podrás continuar a los templos de los patios interiores, descansar un rato a la sombra de un árbol o ver los rezos de los lamas, escuchar sus cantos de plegaria relajantes al alma, verlos desfilar entre sus túnicas anaranjadas y rojo escarlata.
En cada templo hay tres Budas, el más importante, es el central, representa el presente, el instante irrepetible en que la chispa de vida es un halo, un respiro, un aquí estamos. El Buda de la izquierda representa el pasado y el de la derecha el futuro, a todos se les debe hacer una reverencia, pero es muy importante orar ante el central, representa la vida y la salud, el aquí y ahora. Reitero esto último para ti que eres nostálgico por naturaleza, que cada día al levantarte recuerdas el rostro de amado, para ti que no haces más que imaginar a los tuyos en un río bajo la sombra de los ocotes, a ti que extrañas el sonar de las guitarras y el canto del cenzontle, para ti que no dejas de morderte las uñas de tus sueños. Y para ellos, los que se desvelan pensando en el mañana, haciendo listas de pendientes para mañana, para los que siempre están en el futuro. El presente para los chinos es fundamental, lo podemos ver en sus acciones cotidianas, en su forma de vida.
En cada templo hay tres Budas, el más importante, es el central, representa el presente, el instante irrepetible en que la chispa de vida es un halo, un respiro, un aquí estamos. El Buda de la izquierda representa el pasado y el de la derecha el futuro, a todos se les debe hacer una reverencia, pero es muy importante orar ante el central, representa la vida y la salud, el aquí y ahora. Reitero esto último para ti que eres nostálgico por naturaleza, que cada día al levantarte recuerdas el rostro de amado, para ti que no haces más que imaginar a los tuyos en un río bajo la sombra de los ocotes, a ti que extrañas el sonar de las guitarras y el canto del cenzontle, para ti que no dejas de morderte las uñas de tus sueños. Y para ellos, los que se desvelan pensando en el mañana, haciendo listas de pendientes para mañana, para los que siempre están en el futuro. El presente para los chinos es fundamental, lo podemos ver en sus acciones cotidianas, en su forma de vida.
domingo, septiembre 10, 2006
Del parque del sol al Templo Lama
Isolda Dosamantes escribe esto a los 12 minutos del día fatídico 11 de septiembre, porque nunca, nunca se olvidará aquella mañana en que antes de salir hacia el trabajo, su abuelita le dijo ven Isolda a ver las noticias, ¡la tercera guerra…!,!Isolda están atacando a los gringos! Y sí llegué en el momento en que repetían las escenas del primer avionazo cuando cayó el segundo, y el escalofrío recorriendo la espalda y el no lo puedo creer, y el ya valió madres, el mundo está de cabeza y somos vecinos, y quién fue y toda la confusión (confusión porque había en mí una sonrisa de hasta que alguien los paró en seco) que me lleve a la prepa peje donde trabajaba y la incomunicación ahí, pues Santa Martha, aunque ya no era cárcel parecía, la altas paredes, los muros gruesos con olor a muerte, a llanto, a aquí alamejor era la mazmorra, y ahí en mi cubículo nuevo con los muebles nuevos, todo de blanco color hospital, no había teléfono, ni teles, ni Internet y todos queriendo que diera la hora de la comida para salir un rato y ver que pasaba , si seguían secuestrando aviones, qué pasaba. Y luego ya sabemos la historia, el terrorismo y el autoproclamarse EUdefensor del mundo y decir no a la ONU y empezar la ofensiva y los muertos, y la muerte que va con el autoritarismo de la mano, de la mano con la guerra, con la pobreza, con la ley del más fuerte. del yo mando. Ayer la ONU feliz de lograr acuerdos en Medio Oriente y que bueno, pero la cara del encargado de la ONU, era una cara que no era paz, era un rostro que sabe que andamos de patas, que el dinero maneja los rumbos que el petróleo, que las religiones. Y yo no debería estar hablando de estas cosas que a México no le importan porque sólo vemos pa dentro, porque estamos sumidos en nuestras grillas particulares que si este era del PAN y el otro perredísta, y el otro de la antigua guardia del PCM, que mira el video escándalo, que el otro fue priísta que mira aquel dinosaurio que se salió de los Picapiedra. Y debería estar hablando de que los plantones me molestaban como ciudadana y que al mismo tiempo decía, pues cada quien, y que me sorprendían algunas personas con su apasionamiento por el peje, y algunos taxistas descalificando ese movimiento porque su chamba era de los pantera de los ilegales y otro taxista feliz, “como que ya era hora de cambiar, ya le dimos chance a la derecha, ya logramos quitar al PRI, pues ahora que le toque a izquierda” y uno escuchaba versiones diversas de un lado para otro, los azules más serenos, los ciudadanos molestos porque para llegar a sus chambas costaba, yo debería decir que había casos incongruentes, que no había discurso, que todo sonaba a farsa, que unos por el hueso y otros por mantener la chamaba, yo debería decir que en mi hermoso México no miramos pa afuera, que llevamos años peleándonos, que ya basta de grillas, que hay que chambear, que el mundo es más grande, pero no puedo hacer un discurso, porque los elementos que tengo no tienen fuerza porque no soy amarilla, porque mi primer voto fue para Cárdenas, porque yo sí creo en las instituciones, porque fui liberal y soñé alguna vez con un país mejor, porqué lo intente como joven, porque me dí cuenta de que los viejos no se iban, no se irían, no se han ido, porque en México seguimos como en la época de los caudillos, mirando pa dentro, pero el mundo es más grande, pero el mundo es más grande, ya dice el dicho que los mexicanos andamos norteados, porque a poco no, Disney es muy padre, si que miramos pal norte y andamos desOrientados.
Y aún con todo el desbarajuste, y las tripas que no revientan con la incertidumbre de muchos días después de las votaciones, y con un presidente electo y un excandidato que quiere hacer una convención que me recuerda a Marcos, aún con todo esto y sin hablar de ello ayer hubo una noche mexicana, porque a los mexicanos nos gusta la fiesta, por el mes de la patria porque sí, y fue en un parque maravilloso, el parque del sol donde hay un reloj solar y un lago que tiene a la orilla una especie de canoa china que no es una canoa sino un pequeño bar con sauces llorones, con pescadores con cañas, y allí estaban Tato y Luis Lojero con otros dos músicos tocando sones y había tostadas a 15 yuanes y más europeos que mexicanos y todos hablaban de sueños, de proyectos, de trabajo e China y no se tocó nunca el tema México porque duele porque hasta acá hay dos versiones, dos posturas. Y había una familia hermosa con sus seis hijos y unos chinos practicando su español y unos pintores y todos estábamos alegres.
Y es que este blog no es de política y ya no puedo seguir porque para hablar del templo lama y del incienso hay que hacerlo con paz, con la tranquilidad que se respira en los templos en los ojos de buda y ahora solo recuerdo la mirad de los guardianas los que a la entra del templo tienen ojos enormes los que cuidan, y es que para hablar de los monjes con sus colores naranja y rojos y sus rezos con rosarios que no son rosarios y sus cantos y la gente que hace reverencias se necesita paz en el corazón y no tengo paz y es que México me preocupa, me preocupan los necios y la posible intolerancia. Y yo quiero hablar del templo y de las manzanas y de los inciensos y de las reverencias y decir que son tres budas que el del centro es el presente que el de la izquierda es el pasado que el de la derecha el futuro y decir que los chinos hacen reverencias al del centro, porque acá es importante el presente, y no puedo no puedo dejar las teclas, y quería poner fotos y que no puedo y que no quiero que ya habrá bloga para hablar del templo y del parque, que me despido, hasta luego.
Y aún con todo el desbarajuste, y las tripas que no revientan con la incertidumbre de muchos días después de las votaciones, y con un presidente electo y un excandidato que quiere hacer una convención que me recuerda a Marcos, aún con todo esto y sin hablar de ello ayer hubo una noche mexicana, porque a los mexicanos nos gusta la fiesta, por el mes de la patria porque sí, y fue en un parque maravilloso, el parque del sol donde hay un reloj solar y un lago que tiene a la orilla una especie de canoa china que no es una canoa sino un pequeño bar con sauces llorones, con pescadores con cañas, y allí estaban Tato y Luis Lojero con otros dos músicos tocando sones y había tostadas a 15 yuanes y más europeos que mexicanos y todos hablaban de sueños, de proyectos, de trabajo e China y no se tocó nunca el tema México porque duele porque hasta acá hay dos versiones, dos posturas. Y había una familia hermosa con sus seis hijos y unos chinos practicando su español y unos pintores y todos estábamos alegres.
Y es que este blog no es de política y ya no puedo seguir porque para hablar del templo lama y del incienso hay que hacerlo con paz, con la tranquilidad que se respira en los templos en los ojos de buda y ahora solo recuerdo la mirad de los guardianas los que a la entra del templo tienen ojos enormes los que cuidan, y es que para hablar de los monjes con sus colores naranja y rojos y sus rezos con rosarios que no son rosarios y sus cantos y la gente que hace reverencias se necesita paz en el corazón y no tengo paz y es que México me preocupa, me preocupan los necios y la posible intolerancia. Y yo quiero hablar del templo y de las manzanas y de los inciensos y de las reverencias y decir que son tres budas que el del centro es el presente que el de la izquierda es el pasado que el de la derecha el futuro y decir que los chinos hacen reverencias al del centro, porque acá es importante el presente, y no puedo no puedo dejar las teclas, y quería poner fotos y que no puedo y que no quiero que ya habrá bloga para hablar del templo y del parque, que me despido, hasta luego.
viernes, septiembre 08, 2006
Invitación Costarrica
Un homenaje a la amiga Delia es un homenaje al trabajo constante con las letras, con las palabras, con la vida. Que bien que se festeje a las personas cuando hay juventud, cuando hay sueños.
Delia Mac Donald y otras cosas
Ha sido una semana vertiginosa, el viernes pasado recibí la visita de uno de mis exalumnos de Hunan era, por decirlo así uno de los mejores de su clase, dedicaba gran parte de su tiempo libre a estudiar y eso se notaba en el incremento se su vocabulario, aunque como es muy nervioso y le gusta hablar rápido, no lucía mucho su nivel de español, en fin vino a casa para presenciar mi primer desaguisado con mi nuevo departamento, que si bien muy bonito no puede recibir visitas antes de las doce del día y las personas se tienen que ir antes de las once de la noche, tons uno se pregunta ¿es mi departamento o no? Si fuera mi primer año en China estaría verde, pero sé que hay algunas reglas, para m incomprensibles, que son normales. Me contaron que esta regla es nueva debido a que hace unos años los profesores metían prostitutas a sus habitaciones, huy perdón, hay que decir que en el discurso oficial no existen ni prostitutas ni homosexuales en este país.
Hablando de otras cosas, me da gusto que las amigas poetas trabajen y que hasta les hagan homenajes, tal es el caso de la poeta tica Delia MacDonald, que además, se ha convertido en una narradora, que por lo que me chismearon, es tallereada por la gran escritora Tony Morrison, de quien soy fan desde que me la presentó (por así decirlo) Felipe Alcántar, el famoso pintor originario de Chihuahua, Chihuahua, ha que delicia leer Ojos azules, esa fue la primer novela que leí de Morrison, recomendable siempre para todos los lectores, la premio Nóbel es maravillosa.
Para finalizar esta entrada de notas breves he de comentar que en esta universidad hay alberca, y como soy medio sirena seré feliz, que en México las cosas están verdes, entre un azul que pone amarillezco a los soles, que estar en México sólo me produce nostalgia perezosa, que mis nuevos alumnos son muy divertidos, que amo a mis sobrinas, que el otro día me dijeron que tenía unas hermosas sandías, que me ruboricé, que me ataque de risa cuando repitieron mirándome…a los pies ¡que bellas sandías tiene usted! Y contuve la carcajada diciendo, si, gracias son sandalias, que Estrella del Valle tiene un blogg familiar de envidia, que tengo sueño pues son las dos treinta y cuatro de la madrugada del nueve de septiembre de 2006 y me voy a dormir.
P.D. Las fotos: Alfonso, mi alumno chino de Hunan vestido de rojo con otros dos latinos, otoño de 2005, invitación al homenaje de Delia, Isolda en HoHai, primavera de 2005
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