domingo, septiembre 10, 2006

Del parque del sol al Templo Lama

Isolda Dosamantes escribe esto a los 12 minutos del día fatídico 11 de septiembre, porque nunca, nunca se olvidará aquella mañana en que antes de salir hacia el trabajo, su abuelita le dijo ven Isolda a ver las noticias, ¡la tercera guerra…!,!Isolda están atacando a los gringos! Y sí llegué en el momento en que repetían las escenas del primer avionazo cuando cayó el segundo, y el escalofrío recorriendo la espalda y el no lo puedo creer, y el ya valió madres, el mundo está de cabeza y somos vecinos, y quién fue y toda la confusión (confusión porque había en mí una sonrisa de hasta que alguien los paró en seco) que me lleve a la prepa peje donde trabajaba y la incomunicación ahí, pues Santa Martha, aunque ya no era cárcel parecía, la altas paredes, los muros gruesos con olor a muerte, a llanto, a aquí alamejor era la mazmorra, y ahí en mi cubículo nuevo con los muebles nuevos, todo de blanco color hospital, no había teléfono, ni teles, ni Internet y todos queriendo que diera la hora de la comida para salir un rato y ver que pasaba , si seguían secuestrando aviones, qué pasaba. Y luego ya sabemos la historia, el terrorismo y el autoproclamarse EUdefensor del mundo y decir no a la ONU y empezar la ofensiva y los muertos, y la muerte que va con el autoritarismo de la mano, de la mano con la guerra, con la pobreza, con la ley del más fuerte. del yo mando. Ayer la ONU feliz de lograr acuerdos en Medio Oriente y que bueno, pero la cara del encargado de la ONU, era una cara que no era paz, era un rostro que sabe que andamos de patas, que el dinero maneja los rumbos que el petróleo, que las religiones. Y yo no debería estar hablando de estas cosas que a México no le importan porque sólo vemos pa dentro, porque estamos sumidos en nuestras grillas particulares que si este era del PAN y el otro perredísta, y el otro de la antigua guardia del PCM, que mira el video escándalo, que el otro fue priísta que mira aquel dinosaurio que se salió de los Picapiedra. Y debería estar hablando de que los plantones me molestaban como ciudadana y que al mismo tiempo decía, pues cada quien, y que me sorprendían algunas personas con su apasionamiento por el peje, y algunos taxistas descalificando ese movimiento porque su chamba era de los pantera de los ilegales y otro taxista feliz, “como que ya era hora de cambiar, ya le dimos chance a la derecha, ya logramos quitar al PRI, pues ahora que le toque a izquierda” y uno escuchaba versiones diversas de un lado para otro, los azules más serenos, los ciudadanos molestos porque para llegar a sus chambas costaba, yo debería decir que había casos incongruentes, que no había discurso, que todo sonaba a farsa, que unos por el hueso y otros por mantener la chamaba, yo debería decir que en mi hermoso México no miramos pa afuera, que llevamos años peleándonos, que ya basta de grillas, que hay que chambear, que el mundo es más grande, pero no puedo hacer un discurso, porque los elementos que tengo no tienen fuerza porque no soy amarilla, porque mi primer voto fue para Cárdenas, porque yo sí creo en las instituciones, porque fui liberal y soñé alguna vez con un país mejor, porqué lo intente como joven, porque me dí cuenta de que los viejos no se iban, no se irían, no se han ido, porque en México seguimos como en la época de los caudillos, mirando pa dentro, pero el mundo es más grande, pero el mundo es más grande, ya dice el dicho que los mexicanos andamos norteados, porque a poco no, Disney es muy padre, si que miramos pal norte y andamos desOrientados.

Y aún con todo el desbarajuste, y las tripas que no revientan con la incertidumbre de muchos días después de las votaciones, y con un presidente electo y un excandidato que quiere hacer una convención que me recuerda a Marcos, aún con todo esto y sin hablar de ello ayer hubo una noche mexicana, porque a los mexicanos nos gusta la fiesta, por el mes de la patria porque sí, y fue en un parque maravilloso, el parque del sol donde hay un reloj solar y un lago que tiene a la orilla una especie de canoa china que no es una canoa sino un pequeño bar con sauces llorones, con pescadores con cañas, y allí estaban Tato y Luis Lojero con otros dos músicos tocando sones y había tostadas a 15 yuanes y más europeos que mexicanos y todos hablaban de sueños, de proyectos, de trabajo e China y no se tocó nunca el tema México porque duele porque hasta acá hay dos versiones, dos posturas. Y había una familia hermosa con sus seis hijos y unos chinos practicando su español y unos pintores y todos estábamos alegres.

Y es que este blog no es de política y ya no puedo seguir porque para hablar del templo lama y del incienso hay que hacerlo con paz, con la tranquilidad que se respira en los templos en los ojos de buda y ahora solo recuerdo la mirad de los guardianas los que a la entra del templo tienen ojos enormes los que cuidan, y es que para hablar de los monjes con sus colores naranja y rojos y sus rezos con rosarios que no son rosarios y sus cantos y la gente que hace reverencias se necesita paz en el corazón y no tengo paz y es que México me preocupa, me preocupan los necios y la posible intolerancia. Y yo quiero hablar del templo y de las manzanas y de los inciensos y de las reverencias y decir que son tres budas que el del centro es el presente que el de la izquierda es el pasado que el de la derecha el futuro y decir que los chinos hacen reverencias al del centro, porque acá es importante el presente, y no puedo no puedo dejar las teclas, y quería poner fotos y que no puedo y que no quiero que ya habrá bloga para hablar del templo y del parque, que me despido, hasta luego.

1 comentario:

Anónimo dijo...

That´s Relativity, diría Eintein.
Aquí apenas son las 3 de la tarde del 10 de septiembre del 2006.
Y también se recuerda mucho más el otro 11 de septiembre; aquel en el que la injusticia chispeó no `´olo Santiago de chile y Latinoamerérica, sino al mundo.

En fin, querida Iso.
También recuerdo la mañana del 11 de septiembre del 2001, cuando Brozo mostraba la imagen que parecía montaje.

Saludos.